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¿Qué es el Parvovirus de los Perros?

La parvovirosis canina es una enfermedad infecciosa de origen vírico, grave y potencialmente letal. Por lo tanto, ante cualquier sospecha, es imprescindible acudir de forma inmediata con vuestro veterinario de confianza.

En este artículo de nuestro blog, hablaremos de esta enfermedad frecuente en los cachorros aunque estén vacunados: síntomas, diagnóstico y tratamiento.

¿Cómo se contagian los animales?:

Principalmente mediante contacto oral y/o nasal directo de un perro infectado a otro, a través de las heces de perros infectados y vía intrauterina, es decir, desde la madre infectada a sus cachorros durante la gestación.

El virus es muy resistente en superficies y objetos que hayan estado en contacto con las heces contagiadas, por lo que es imprescindible el aislamiento completo de los pacientes infectados y desinfectar bien nuestras manos, ropa, ambiente y objetos con los que hemos manipulado al enfermo.

¿Qué síntomas produce?:

  • Diarrea normalmente hemorrágica
  • Vómitos
  • Fiebre
  • Falta de apetito y decaimiento
  • Apatía y/o letargo
  • Depresión
  • Pérdida de peso
  • Dolor abdominal
  • Deshidratación
  • Muerte del paciente

Diagnóstico:

El diagnóstico se realiza mediante análisis de sangre por la disminución del número de leucocitos en sangre y por la detección del parvovirus en una prueba rápida de antígenos en las heces del animal.

Esta prueba puede ofrecer falsos negativos durante los 3-4 días posteriores a la infección, ya que en esa fase no se excreta el virus.

La excreción se produce alrededor del día 8-10 siendo más fácil obtener el diagnóstico a través de test de antígenos, que precisará de confirmación definitiva mediante PCR.

Tratamiento:

  • Fluidoterapia endovenosa
  • Tratamiento de soporte para contrarrestar los síntomas
  • Soporte nutricional
  • Controlar la aparición de complicaciones
  • Controlar la motilidad digestiva y la distensión gástrica

¿Se puede prevenir?:

La mejor manera de evitar el contagio lo conseguimos a través de la vacunación de los cachorros, realizando un buen protocolo de primovacunación a la edad adecuada.

Además, debemos impedir la exposición del cachorro con heces de perros contagiados, lo que ayudará a minimizar las posibilidades de contagio.

Es importante destacar que el parvovirus canino NO se contagia a humanos.